Lo que queda claro, es que el futuro parlamento catalán estará muy dividido. Todos querrán cambiar las relaciones de poder con España, pero la mayoría -con más o menos profundidad- será partidaria de una reforma constitucional, con tendencia a la constitución de un Estado Federal. Si en vez de contar escaños contamos los votos, el porcentaje aumenta aún más.

Artículo publicado en catalán en Crónica Global, el 15 de julio de 2015

Traducción al castellano del artículo publicado en Crónica Global el 15 de julio de 2015